Ternium, el nuevo vecino favorito de los palmarinos
Habitantes del municipio confían en que la llegada de esta empresa mejore su calidad de vida. Según la siderúrgica, el 60% del personal será de Palmar.
Sentado en la terraza de su casa, a la que le va ‘metiendo’ mano cada vez que una ‘maraña’ deja una jugosa ganancia, pasa los días Tomás Guillermo Charris Mercado, un hombre que hace un par de almanaques pasó los 50 años y que es conocido ampliamente en Palmar de Varela por sus grandes dotes en el riguroso y exigente oficio de soldar. Es una voz oficial y con influencia si se trata de hablar de fundir aceros.
Tomás es de esos hombres que se le miden “a lo que sea” y que nunca deja de meterle el hombro al laburo por más crítica que sea la situación, pero la vida le ha jugado en contra últimamente y su situación económica actual es compleja.
Hace más de un año, cuando trabajaba en un taller ubicado en Malambo, Charris Mercado se estrelló con el desolador panorama que creó el coronavirus y perdió su puesto. La llegada a su fin de una estable etapa laboral lo golpeó bastante, pero con el pasar de los meses pudo levantarse y hoy en día estabilizó un poco sus finanzas, un objetivo que le devolvió la sonrisa y que se cumplió paralelamente con la llegada de un nuevo vecino a su natal municipio, un arribo que le generó grandes expectativas y le devolvió la ilusión de que su pueblo crezca en distintos frentes y sea un punto de referencia para salir adelante a sus habitantes más jóvenes.
En toda población pequeña la información vuela rápido y más si ellos están involucrados de una forma u otra. Primero se conoció que Palmar de Varela, un municipio históricamente dedicado a la ganadería o agricultura, fue escogido para el asentamiento de una enorme empresa con un importante estatus en la industria de los aceros. Luego –en 2018– corrió como bola de nieve que se puso en marcha una obra en un terreno de 30.000 metros cuadrados y, por último, el pasado 18 de febrero, con visto bueno de Iván Duque, presidente de Colombia, los cerca de 30.000 habitantes de este rincón del Atlántico conocieron el centro industrial Ternium, un vecino “anhelado” para personas como Tomás, quien pese a no hacer parte del 60% del personal palmarino que laborará en este empresa, considera que esta es la oportunidad perfecta para que su lugar de origen deje “atrás el estancamiento que ha sufrido últimamente”.
“Esto es algo muy bueno para aquí para Palmar y para la Zona Oriental. Ojalá todo salga bien y muchas personas de aquí puedan ingresar a la empresa. La llegada de Ternium es algo muy bueno porque con su llegada se puede salir adelante. Estos pueblos están muy estancados y lo primordial es que lleguen estas empresas que reactiven la economía”, manifestó Charris Mercado.
La llegada de Ternium y su propuesta de usar mano de obra palmarina ha llenado de mucha ilusión en materia de vacantes laborales a los habitantes de este municipio, pero no es el único punto a favor. Los nativos han manifestado en varias oportunidades que, además de los 1.000 empleos que se crearon para la construcción de la empresa, la puesta en marcha de la industria beneficiaría en materia tributaria a Palmar y con esto el “pueblo” podría crecer en materia de infraestructura.
“Me parece que lo que está pasando es excelente porque le mejora calidad de vida a los profesionales del pueblo. Esto es un inicio y una base que está poniendo esta empresa hoy en día para que lleguen otras empresas. Pienso que Palmar va a tener mejores ingresos y van a mejorar las calles, por ejemplo”, aseguró Jorge Mercado Martínez.
Galdino Orozco Fontalvo, alcalde de Palmar de Varela, explicó que la llegada de Ternium al municipio es una buena nueva para esta parte del departamento y para la Región Caribe en general por las ganancias tributarias que dejaría la empresa al término de 10 años, un periodo de gracia que se les obsequió como canje por asentarse en el suelo palmarino.
“Es un balance muy positivo para nuestra municipalidad. Palmar de Varela venía proyectándose y preparándose para la llegada de estas industrias cuando hicimos unas modificaciones en el esquema de ordenamiento territorial y a muchas tierras le cambiamos el origen (industrial). Con estas modificaciones no solo permitimos el ingreso de Ternium, sino de tres o cuatro industrias más. A la vuelta de 10 años, cuando empiecen a ingresar los tributos, Palmar va a ser un municipio muy próspero”, explicó el mandatario.
“Estamos muy orgullosos de tener una de las siderúrgicas más importantes del país”, agregó.
Por su parte, Ternium, a través de un comunicado de prensa, informó que con el objetivo de reactivar la economía de Palmar de Varela usará mano de obra calificada de este municipio y ayudará en la formación de los profesionales que entrarán a hacer parte de la siderúrgica.
“Tenemos un compromiso con el desarrollo de las comunidades que rodean la planta, principalmente en los municipios de Palmar de Varela y Ponedera. La llegada de la planta ha significado empleos de calidad y, a su vez, permitirá la dinamización de la economía de la zona por los múltiples servicios que son requeridos para la correcta operación de la misma. Con este proyecto hemos formado 590 personas en alianza con el Sena y generado cerca de 300 empleos de calidad”, informó la entidad.
“El 60% del personal que trabaja en la nueva planta es de Palmar de Varela, lo que contribuye con la generación de empleo en el Atlántico. De esta manera, Ternium se convierte en un jugador clave en el desarrollo industrial de la región y en la reactivación económica del país”, dijo Sebastián Castro, presidente de Ternium Colombia, quien aseguró que el primer lote de varilla que se elaboró se vendió en una semana.
Durante la etapa de construcción de la empresa se crearon alrededor de 1.000 oportunidades de empleo con una participación de 110 mujeres, un hito importante –según la compañía– teniendo en cuenta que estas labores han sido consideradas históricamente como exclusivas para los hombres.
El nuevo centro productivo, cuya inversión superó los $270 mil millones, cuenta con una capacidad de producción anual de 520 mil toneladas de varillas de acero y rollos compactos.
