Atlántico

En video | Atlántico será bandera en la inserción laboral de migrantes

A través de la iniciativa el departamento pasará  de ser un territorio de acogida a uno de oportunidades laborales para los migrantes.

Colombia está en miras de pasar de ser un país de acogida a ser uno con una política pública de colaboración intersectorial que fomente el empleo para la población migrante. Así lo anunció Lucas Gómez García, gerente de Fronteras de la Presidencia de la República, en su reciente visita a Barranquilla.

El funcionario manifestó que el Atlántico y su capital serán los primeros entes territoriales en enrumbar su política migratoria hacia ese camino de la inclusión, precisamente, por ser el tercer departamento del país, según cifras de Migración Colombia, en tener la mayor concentración de población venezolana con 161.313 personas.

El programa ‘Alianza para las Migraciones’ se dará a través de un trabajo articulado entre las administraciones locales, la Fundación Mario Santo Domingo, Open Society Foundation y la Gerencia de Fronteras, quienes apoyarán programas y estrategias de empleo inclusivo, involucramiento del sector privado en la agenda migratoria y de diálogo con la sociedad civil, de forma alineada con la estrategia de reactivación económica de la ciudad.

Esta estrategia, según el gerente, nació de la necesidad de sumar esfuerzos para potenciar el desarrollo social y económico en Colombia, y movilizar apuestas innovadoras y multisectoriales con enfoques territoriales y de respuesta integral.

“Estas son buenas noticias de integración, pues, la migración debe ser vista como una oportunidad. Esta estrategia busca integrar a los venezolanos, quienes son una mano de obra calificada, con el sector privado; es decir, nosotros pondríamos a disposición de las empresas el personal que ellos necesiten. También ayudaríamos a la regularización migratoria de esa población”, señaló Gómez en diálogo con EL HERALDO.

Un bono. En este contexto, de la mano de varios aliados, se implementará el tercer Bono de Impacto Social (BIS) en Colombia, enfocado en empleabilidad para la población vulnerable, incluyendo migrantes y comunidades de acogida.

Para poner en marcha el proyecto, el gerente explicó que están enfocados en lo que sería una primera fase, que corresponde a identificar a las empresas y analizar todo lo que necesitan para reactivar sus economías, y por otro lado se está revisando cuáles son las fortalezas de los migrantes y las poblaciones en donde este grupo tiene asentamiento.

“Hacemos una caracterización de esa mano de obra y comenzamos el proceso de acercamiento con el sector privado. Con la idea de ayudar al migrante enviamos un mensaje  de reactivación para generar estrategias que busquen el mayor beneficio para todas las poblaciones”, manifestó el funcionario.

¿Cómo buscar esa población?

El gerente señaló que esa búsqueda se dará con la ayuda de la Alcaldía de Barranquilla y la Gobernación del Atlántico, para acercarse a las asociaciones de base que agrupan a los migrantes y también en las juntas de acción comunal.

“Esta es una gran apuesta del Gobierno nacional, pues está pensando saltar del asistencialismo a tener una mano de obra productiva que nos ayude en la lógica de que Colombia va a crecer económicamente con el apoyo de la migración”, expresó el funcionario.

Ante la posibilidad de que el programa en Barranquilla genere un “efecto llamada”, Gómez señaló que ese factor “no le preocupa” debido a que es una estrategia “que tiene unos pasos” y que su fin último es replicarlo en otras ciudades del país.

El programa contará con la financiación de los aliados y de los recursos de cooperación internacional y de la Unión Europea y “de otros donantes” que puedan mirar en este programa una alternativa para lograr la inserción.  “La idea es que, a final de año, ya pueda estar implementado y que el grueso de su desarrollo se dé en 2021”.

Gómez destacó que la estrategia está dirigida, en principio, solo  a migrantes regulares, es decir, aquellos que permanecen en el país de forma legal, pero señaló que también se busca “fomentar la regularización” de otros venezolanos, una vez se haya superado la fase de identificación de la mano de obra.

“Hay que destacar que las empresas ganarían en productividad al incluir en sus nóminas a esta mano de obra, pero lo más importante es ganar en conciencia de que el migrante es una gran oportunidad, además de ofrecer algunos incentivos a los empresarios, aunque no se prevé que sean tributarios. En Barranquilla hay muchos empresarios migrantes que entienden este fenómeno, por haber llegado de otros países a echar raíces acá”, manifestó el funcionario.

Barranquilla es considerada por el Gobierno nacional como una de las ciudades líderes en inclusión de población migrante, lo cual crea un ambiente propicio para lograr, de manera efectiva, la implementación de este y otros programas en materia de población venezolana.

Cita con los embajadores

El próximo 20 de noviembre tendrá lugar en Maicao la inauguración del Centro de Atención al Migrante, donde más de 20 embajadores  con sus misiones diplomáticas serán llevados al evento “para que entiendan lo que es una frontera en Colombia”.

“Las fronteras de los países no son iguales a las existentes acá, son complejas y con dificultades que no se logran entender fácilmente. Hay países que han entendido el fenómeno y que nos han apoyado desde el primer momento”, explicó Gómez.

La lupa a la situación en la frontera
Lucas Gómez, gerente de Frontera, en EL HERALDO. Hansel Vasquez

El gerente Gómez aprovechó la oportunidad para recalcar que la frontera entre Venezuela y Colombia se mantiene cerrada y le hizo un llamado a los migrantes para que no “se arriesguen”.

“Sabemos que debemos controlar esas estructuras criminales que se quieren aprovechar del control de las fronteras, pero hay que dejar claro que Colombia va a ejercer su soberanía en ese territorio limítrofe. Estamos redoblando esfuerzos de controles fronterizos  con Policía y Ejército para enviar ese mensaje al migrante y a las estructuras criminales”, enfatizó el funcionario.

Los venezolanos no han dejado de cruzar, dijo Gómez, y la razón “es porque no tienen comida en su país. Eso hace que tengamos que poner todo nuestro empeño para poder atenderlos”.

“El 31 de octubre finaliza un ciclo de cierre de la frontera que lo contempla el decreto de emergencia, eso no quiere decir que el primero de noviembre abriremos la frontera, acá hay un elemento fundamental que es la responsabilidad que tenemos como Gobierno y es la de proteger a los colombianos y a los migrantes, pero estamos revisando con las autoridades de salud para hacerlo de una manera responsable”, afirmó el funcionario.

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