El Heraldo
En esta vivienda del barrio Terranova, Soledad se encontraba la pequeña de un año que murió ahogada cuando cayó en un tanque con agua el 10 de abril. Orlando Amador.
Atlántico

Accidentes domésticos de niños: tragedias que se pueden evitar

En lo corrido del año, 6 menores han perdido la vida en medio de accidentes caseros en el departamento. Autoridades y expertos hablan sobre causas y precauciones.

El llamado de una pequeña de tres años a su mamá para que viera a su hermana de un año fue la alerta para que Karelis Araujo reaccionara a ver qué ocurría. La mujer había dejado a las hermanitas en un cuarto mientras realizaba los quehaceres del hogar y decidió prender un radio para escuchar música. 

Mientras eso ocurría a un costado de la sala de la casa, ubicada en el barrio Terranova de Soledad, había un tanque con agua que “no estaba muy lleno”, según cuenta Karelis. Sin embargo, este tenía la altura suficiente que representaba un riesgo inminente para un bebé de escasos 12 meses.

“¡Ay mami!, mira la bebé (...) y cuando fui a ver qué ocurría, ya la bebé no se movía, no hacía nada, ella se cayó de cabeza”, contó la madre de la pequeña mientras su mirada se perdía en el relato de aquel suceso registrado el 10 de abril.

Reveló que al ver esa imagen de su hija comenzó a gritar y pidió ayuda a una vecina, quien le hizo reanimación a la pequeña. Al final, los esfuerzos no evitaron un desenlace fatal.

 “Mi vecina buscó un motocarro, me fui a la clínica Agrupasalud y por más que los médicos intentaron y realizaron maniobras de reanimación, no pudieron hacer nada. Llegué muy tarde, la bebé había muerto”, expresó la joven que tan solo un mes atrás había llegado de Venezuela, tal vez para conseguir un mejor futuro para sus hijas, pero el destino le jugó una mala pasada.

Para la familia Beltrán, residenciada en el barrio Gladiador de Malambo, el tiempo parece haberse detenido desde el 18 de marzo, cuando un incendio consumió su vivienda y cobró la vida de un pequeño de 3 años, quien dormía en uno de los cuartos.

Aunque en la vivienda vivían más de ocho personas, muchos de ellos menores de edad, todos salieron corriendo cuando se iniciaron las llamas y olvidaron que el niño estaba en el interior.

“Mi nieto estaba durmiendo y los hermanos estaban despiertos cuando se presentó el incendio, ellos lograron salir y no se dieron cuenta que el bebé había quedado dentro”, expuso Carlos Beltrán, abuelo de la víctima.

Recordó que los vecinos intentaron apagar el fuego, pero en el sector no contaban con servicio de agua lo que dificultó las labores para sofocar las llamas.

Llamado de autoridades

La tragedia que arropa a estas familias no son casos aislados. En lo corrido del año, otros cuatro menores de edad han fallecido en accidentes caseros que han ocurrido en “cuestión de segundos”. Una situación que ha prendido las alarmas de las autoridades, al consolidarse seis casos entre enero y mayo del presente año.

Así lo reiteró Benjamín Collante, director del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) en el Atlántico, quien no ocultó su preocupación debido a los recientes casos de accidentes domésticos que han cobrado la vida de niños.

El funcionario expuso que el sinsabor que dejan estas noticias es absoluto. Esto, ha motivado hacer una gran convocatoria con las entidades como Fiscalía General de la Nación, Defensoría del Pueblo, Procuraduría General de la Nación, Personería y Secretarías de salud.

“Tenemos claridad que se tratan de accidentes y que ningún padre quiere que su hijo fallezca. Todos los accidentes que hemos estado atendiendo obedecen a una situación que la familia tiene que estar muy pendientes de sus niños”, sostuvo Collante.

Indicó, además, que han venido trabajando en una campaña con todos los actores para que se lleve siempre el mensaje de prevención, autocuidado y que los niños tienen que tener una vigilancia permanente.

“Reiteramos nuestro apoyo psicosocial porque se pierde a un infante. Eso no hace parte de nuestros paisajes, de nuestra cultura. Si hay algo que nos caracteriza es precisamente el cuidado por nuestros niños. Los descuidos que causan los accidentes tenemos que evitarlos a toda costa”, sentenció el director regional del Bienestar Familiar.

Aseveró que los llamados es a que padres entiendan que estas conductas pueden derivar en una responsabilidad penal con las consecuencias que ello conlleva: privación de la libertad, restablecimiento de derechos, perder la custodia en casos de niños sobrevivientes ser llevados a hogares protectores.

“Todo eso puede ocurrir en un marco legal para la protección de los niños que está consignado en el artículo 44 de la Constitución Política”, expuso.

Menores lesionados

La Policía de Infancia y Adolescencia en Barranquilla recalcó que los padres son los “responsables directos” de garantizar la seguridad de los niños dentro y fuera del hogar.

“Se vienen  registrando casos en aumento donde las afectaciones ocurren cuando el niño se encuentra al cuidado de otras personas, como familiares o vecinos que hacen el favor de cuidarlos mientras sus padres están trabajando, lo que genera que el factor de cuidado disminuya ya que estas personas están atentos a otras tareas personales”, sostuvo la dependencia.

Desde la Policía de Infancia y Adolescencia se indicó que, en lo corrido de año, se han reportado 35 casos de niños lesionados por “negligencia” dentro de su núcleo familiar.

“Las lesiones más recurrentes se presentan por quemaduras con líquido hirviente o intoxicación por ingesta de sustancias toxicas”, agregó.

Hablan los expertos

Jorge Bolívar Berdugo, sociólogo e investigador de la Universidad Simón Bolívar, informó que en la primera infancia se dan accidentes fortuitos, tales como ahogamiento, asfixia, caídas, descargas, cuerpos extraños y quemaduras. Indicó que entre las principales causas se encuentran un descuido del cuidador o la imprudencia por parte del menor.

Expuso que uno de cada dos accidentes caseros tiene como víctima a un niño. Según las estadísticas socializadas por el experto, en el 54 % de los accidentes siempre hay una víctima que es menor de edad. Suceden por descuido, imprudencia del niño y del cuidador la poca o relativa atención que le están dando.

Según el experto, la cocina y el baño son las zonas de la casa más inseguras para un menor, por lo que se debe reforzar las medidas de seguridad.

Además, expuso que “la situación económica en muchos casos obliga a que padre y madre deban ir a trabajar, dedicarse al rebusque, mientras dejan a los niños en casa. Hemos visto a pequeños en las ventanas de las casas llorando porque sus papás no están y duran así hasta tres horas”.

También recalcó que este contexto también permite que se presenten casos de abuso sexual, puesto que los niños son vulnerables a que adultos cercanos los violenten.

Agregó que para la temporada de vacaciones que se avecina se debe aumentar la vigilancia a los niños en las casas, porque es cuando tiende a aumentar los casos de accidentes caseros.

“Tenemos que educar a los padres en la atención, porque los hijos no es solo es tenerlos; es alimentarlos, cuidarlos, vigilarlos y en esta etapa acompañarlos. Es decir, el ambiente familiar, debe permitir al niño explorar su creatividad, habilidades y eso se hace es en casa”, sentenció.

Por su parte, la psicóloga clínica Paula Cañavera expresó que los principales factores que pueden desencadenar un accidente en un menor es la falta de supervisión de los padres, ya que un niño no mide los peligros.

“Una de las estrategias para un padre es que eduque a sus hijos sobre los factores protectores o signos de riesgos que se pueden presentar con el fin que el menor tenga la capacidad de identificar y prevenir situaciones de peligros”, recalcó.

Además, la profesional indicó que “cuando es un menor de tres años la supervisión de los padres y emplear siempre el diálogo y la comunicación en los métodos de crianza para que el menor se sienta protegido y amado

Medidas preventivas a adoptar en casa

Desde la Secretaría de Salud de Barranquilla se recomendó a los padres que tengan precaución con las caídas en las escaleras para los menores de edad, igualmente cubrir los balcones de la vivienda con mallas especiales y extremar el cuidado con el uso de velas en casa, entre otras medidas preventivas.

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