Siete recomendaciones para protegerse de las fuertes brisas
Las ráfagas de viento alcanzan por estos días una velocidad de hasta 42 ilómetros por hora y se presentan con mayor intensidad por la tarde, según el Ideam.
Resequedad en la piel, enfermedades respiratorias, daños en la vista y hasta pérdidas monetarias, por deterioro en las fachadas de las viviendas, son algunos de los efectos negativos que pueden causar las fuertes brisas, que por estos días se pasean por las calles de Barranquilla.
De acuerdo con la epidemióloga y experta en salud Ingrid Botías, los ciudadanos pueden protegerse de estos posibles riesgos creando hábitos sencillos, como hidratar la piel, salir a las calles con paraguas, usar tapabocas y abrigarse durante la noche.
Asimismo, la Secretaría de Salud del departamento del Atlántico recomienda no arrojar elementos pesados que puedan ser levantados por los fuertes vientos, así como evitar caminar junto a ellos. Sugiere, además, reforzar los techos de las viviendas.
¿Qué lo produce?
Aunque la intensidad de los vientos ha disminuido, con relación al mismo fenómeno presentado en diciembre pasado, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) detalla que las fuertes brisas de este mes son producidas por “una baja presión en el norte del país, que hace que se generen estas condiciones”.
Entretanto, el Instituto registra ráfagas de viento de cerca de 42 kilómetros por hora, y ubica la jornada de la tarde como la de mayor intensidad “porque sube la temperatura”. De igual manera, la oficina de pronóstico del Ideam advierte que la duración de este fenómeno es indefinido, por lo que recomienda permanecer alerta.
Abrigarse
Acostarse sin sábanas o algún elemento que lo abrigue puede causar enfermedades respiratorias en temporada de fuertes vientos.
Cuidar la piel
El roce de los vientos con la piel puede provocar resequedad en algunas partes del cuerpo, por lo que sugieren usar cremas hidratantes.
Evitar enfermedades
El uso de tapabocas es una de las principales medidas preventivas de enfermedades respiratorias, producidas por el ambiente.
Proteger la vista
Expertos sugieren usar gafas de sol para evitar que las pequeñas partículas que levanta el viento caigan en los ojos y afecten la vista.
Reforzar las cubiertas
La Oficina de Atención de Desastres lanza la alerta de reforzar los techos en esta temporada, para evitar que estos sean levantados.
Alejarse de elementos pesados
La Secretaría de Salud advierte que caminar cerca de objetos pesados puede ser un riesgo en temporada de brisas.
Usar el paraguas
Aunque el paraguas suele utilizarse en temporada de lluvias, este elemento puede protegerlo de las ráfagas y, además, de la radiación UV.
