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¿En qué se parece Charlie Charlie a Pepito Pepito?

El hashtag #CharlieCharlieChallenge es tendencia en Twitter por un juego 'paranormal' de moda entre los jóvenes. En la Costa, estudiantes juegan desde hace años uno muy parecido.

El juego Charlie Charlie o juego de los lápices, que está de moda entre los adolescentes y jóvenes en todo el mundo, gracias a que se volvió tendencia en las redes sociales como Twitter e Instagram, no es tan nuevo como parece.

En la Costa y Colombia, este tipo de prácticas, que algunos llaman paranormales, no son nuevas. Las más conocidas en el Caribe colombiano son la de las tijeras, que consiste en incrustar esta herramienta en la mitad de un cuaderno con espiral, para luego convocar a un supuesto espíritu que responde preguntas a las dos personas que sostienen el cuaderno, poniendo los dedos índices en cada extremo de las orejas de las tijeras.

Otros juegos como la 'ouija', el libro rojo, el de los fósforos o el de las monedas, hacen parte de la larga lista de actividades que a lo largo de la vida estudiantil conocen los jóvenes, en especial al final de la primaria y los inicios del bachillerato o secundaria.

Sobre el juego de la moneda, por ejemplo, se conoció el año pasado un caso de tres escolares que supuestamente terminaron poseídas por un espíritu en un colegio de Barranquilla, en límites con Soledad.

Ese juego es mayormente conocido entre la comunidad escolar barranquillera como Pepito Pepito y consiste en lanzar al aire dos monedas de cualquier denominación y hacerle preguntas a Pepito. Si las dos monedas caen en cara, la respuesta es supuestamente sí y cuando salen ambas en sello, no. Cuando las monedas no caen iguales, según la 'teoría' escolar, significa que Pepito no conoce la respuesta.

"El año pasado una se desmayó, a otra se le metió un demonio y otra más se empezó a rasguñar la cara como loca cuando iba en el transporte escolar. La que se desmayó lo hizo porque la profesora le dijo que era una hija de Dios. Cuando se despertó lo primero que dijo fue: este juego no ha terminado", refirió una estudiante a este medio.

Sobre este tipo de actividades, diferentes religiones han dado su punto de vista. Para todas, estas prácticas resultan dañinas para la formación de los menores. Recuerdan que en la Biblia, en Deuteronomio 18, 9-12, se advierte: "que no se halle a nadie que se dedique a supersticiones o consulte los espíritus; que no se halle ningún... adivino o quien pregunte a los muertos. Porque el Señor aborrece a los que se dedican a todo esto, y los expulsa..."

Sobre este tipo de prácticas catalogadas como diabólicas se ha pronunciado en distintas ocasiones el papa Francisco.

"Todos somos tentados, porque la ley de la vida espiritual, de nuestra vida cristiana, es una lucha: una lucha. Porque el príncipe de este mundo - el diablo - no quiere nuestra santidad, no quiere que nosotros sigamos a Cristo. Alguno de ustedes, tal vez, no sé, podría decir: 'Pero, Padre, ¡qué antiguo es usted: hablar del diablo en el Siglo XXI!'. Pero ¡miren que el diablo existe! El diablo existe. ¡También en el Siglo XXI! Y no debemos ser ingenuos, ¡eh! Debemos aprender del Evangelio cómo se hace para luchar contra él", comentó Francisco el año pasado en Semana Santa.

¿Qué es Charlie Charlie?

La popularidad de estos juegos se ha impulsado recientemente por las redes sociales. Charlie Charlie Challenge data de hace más de tres décadas, pero regresó con fuerza en este 2015 por las publicaciones en video hechas por los jóvenes en Instagram, Facebook y Twitter. Quienes han intentado explicar este fenómeno aseguran que la práctica convoca a un supuesto grupo de demonios mexicanos, según han señalado, incluso, medios norteamericanos como CNN y la misma FOX.

Charlie Charlie consiste en poner en equilibrio dos lápices en forma de cruz sobre un papel en que previamente se ha dibujado un cuadrado con cuatro casillas, con los monosílabos sí y no. Quienes lo juegan, le preguntan a un supuesto demonio llamado Charlie, cualquier tema. Es una especie de 'ouija' casera, han informado los medios anglosajones.

En República Dominicana, donde el cristianismo es la religión mayoritaria, el juego Charlie Charlie está totalmente prohibido en los colegios.

 

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