El bolero, considerado como un aire musical esencialmente romántico y con amplia difusión en Latinoamérica, tuvo grandes intérpretes como Rolando La Serie, Orlando Contreras, Benny Moré, Bienvenido Granda, Olga Guillot, Celia Cruz y Roberto Ledesma, entre otros.

Dichos intérpretes penetraron de manera profunda en sus letras musicales en los diferentes sectores de la sociedad.

A diferencia de estos intérpretes, la gran mayoría de compositores del bolero pasaron inadvertidos, destacándose a Julio Brito, cubano, y los mexicanos Gonzalo Curiel Barba, Claudio Estrada Báez y José Sabre Marroquín.

Julio Brito compuso El amor de mi bohío, que a la letra dice: “Valle plateado de luna/ sendero de mis amores,/ quiero ofrecerle a las flores/ el canto de mi montuna”.

En tanto que Gonzalo Curiel compuso Vereda tropical, registrando: “Voy por la vereda tropical/ la noche plena de quietud/ con su perfume de humedad/. En la brisa que viene del mar/ se oye el rumor de una canción/, canción de amor y de piedad”.

Por su parte, Claudio Estrada compuso el famoso bolero –para el trío Los Panchos– Contigo, contemplando: “Tus besos se llegaron a recrear/ aquí en mi boca/, llenando de ilusión y de pasión/ mi vida loca…”.

Finalmente, José Sabre Marroquín compuso Nocturnal, consignando: “A través de las palmas/ que duermen tranquilas/ la luna de plata/ se arrulla en el mar … tropical”.

Estas cuatro composiciones son una mezcla que identifica la naturaleza y el amor, así como la metáfora constituye una figura central, tocando las fibras románticas de momentos sublimes e inolvidables. Bolero, que grato hacer recordar estas estrofas de estos compositores que a su turno popularizaron a intérpretes de talla musical.

Edgardo Enrique Salebe Morr
Sociólogo y abogado