El Heraldo
John Jairo Velásquez Vásquez, alias Popeye.
Colombia

‘Popeye’ debe presentarse cada mes ante autoridades

John Jairo Velásquez podrá salir del país, pero con orden de un juez.

BOGOTÁ. Dos versiones hay sobre la puesta en libertad el martes de John Jairo Velásquez Vásquez, alias ‘Popeye’, ex jefe de sicarios de Pablo Escobar, tras pagar 23 años de prisión.

La primera es que se dispusieron dos operativos para el traslado de Cómbita a la capital. Uno verdadero y otro falso.

El falso se habría producido sobre las 9:03 de la noche, cuando se creía en la cárcel de mediana y alta seguridad de El Barne, en Cómbita, Boyacá, que una nutrida caravana de vehículos y motos policiales llevaban consigo hacia la capital del país al exintegrante del Cartel de Medellín, John Jairo Velásquez, alias Popeye.

Ese dispositivo sería para despistar a la prensa y a los enemigos del sicario, quien días antes había pedido a la Policía y a la Defensoría del Pueblo protección a su derecho a la vida.
Minutos antes, el exsicario envió un manuscrito a los medios que lo aguardaban a la salida de la penitenciaría, en la que pasó los últimos 12 años de su pena. En el documento, que incluía una huella digital y estaba fechado del mismo día, Velásquez, quien coordinó unos 3 mil asesinatos e intervino directamente en unos 300, pedía perdón a sus víctimas.

Entre tanto, en una camioneta blindada de vidrios polarizados y que salía del penal con bajo perfil y las luces pagadas, se produciría el verdadero traslado de ‘Popeye’ a Bogotá, donde era esperado por cuatro allegados que se enteraron solo pocas horas antes del lugar exacto de la ciudad en que se encontrarían con él.

La segunda versión es que ‘Popeye’, en efecto, iba en la caravana de cinco vehículos y diez motos.

Al respecto, según contó a Blu Radio el defensor del Pueblo de Boyacá, William García, el sicario entró a Bogotá pasadas las 11 de la noche y en el CAI Villa del Prado, de la calle 170 con Autopista Norte, “fue entregado a un grupo de personas que lo esperaban”.

Añadió el funcionario: “el tema meramente nuestro era el acompañamiento, pero el desplazamiento fue bastante rápido. En un punto de Bogotá se hizo el acta de entrega a las personas que lo estaban esperando”.

García precisó que lo recibieron cuatro personas, entre las que se encontraba un familiar. Al momento de la entrega no se pronunció palabra y Velásquez Vásquez y sus conocidos se marcharon en una camioneta privada.

El defensor reveló que durante el camino el expistolero le contó que estaba nervioso: “me dijo que, después de 23 años, volver a la selva de cemento no era fácil”.

“Un hombre nuevo”. En una de sus últimas entrevistas rendidas desde su reclusión, el ex integrante del Cartel de Medellín, entre cuyas víctimas se encuentran numerosos magistrados, jueces, periodistas y policías, aseguró ser “un hombre nuevo”.

“No debemos tener personas como ‘Popeye’, sino como James Rodríguez, Falcao García y Nairo Quintana”, dijo a Caracol quien hubiera reconocido crímenes como homicidios, secuestros y atentados terroristas.

Velásquez Vásquez, entre cuyas víctimas están el líder liberal Luis Carlos Galán y el procurador general de la Nación Carlos Mauro Hoyos, salió en libertad por disposición del Juez de Ejecución de Penas de Tunja, al haber cumplido tres quintas partes de su condena y haber recibido rebajas de su pena por trabajo y estudio.

Y en otra entrevista que dio el año pasado a Semana, anunció que cuando saliera de la cárcel le gustaría trabajar dando conferencias a los jóvenes para que no caigan en “el mismo error” que él cometió.

Lo que sigue para ‘Popeye’. El paradero actual de ‘Popeye’ se desconoce, aunque en una de sus últimas entrevistas dijo que al salir podría pedir ayuda a alguno de sus “amigos”, que permanecen en sus “cuarteles de invierno”, que se cree podrían estar situados en zonas rurales de Medellín o Antioquia.

No obstante, desde donde permanezca el recién liberado, deberá presentarse cada 15 días o cada mes ante una autoridad, que bien puede ser cualquier juez de cualquier lugar del país. Estas diligencias deberá cumplirlas durante un periodo de prueba de 52 meses y 22 días.

En caso de que el funcionario judicial estime que Velásquez ha incumplido, deberá volver a la cárcel y los seis años que le restan de condena.

De otro lado, la Policía informó que no existe aún un reporte de amenazas sobre la vida de ‘Popeye’, pero aclaró que si la Fiscalía lo solicita, la entidad le prestará seguridad.

A su vez, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, ha dicho que de requerirse, se tramitará una petición de salvaguardar la vida del exsicario.

Es muy probable entonces que Velásquez, cuyas declaraciones sirvieron para esclarecer por ejemplo el magnicidio de Galán y condenar por éste al exministro Alberto Santofimio, solicite su ingreso al programa de protección de testigos de la Fiscalía, tras lo cual sería enviado fuera del país, con otro nombre y sin contacto con su familia.

Otra opción es la de simplemente pedir un pasaporte para salir del país, previa orden del juez que lo vigile. Y se descarta que pueda solicitar asilo en otro país, dado que ha cometido delitos de lesa humanidad.

Seis meses atrás, ‘Popeye’ sentenció a la revista mexicana Proceso: “cuando vuelva a las calles, tengo un 80% de probabilidad de que me maten y un 20% de ‘coronar”.
 

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