Cárcel y multas para quienes discriminen a los discapacitados
Penas de 1 a 3 años de prisión y multas hasta de $9 millones.
Solo falta la firma del Presidente Juan Manuel Santos y el proyecto que castiga con cárcel y multas la discriminación de personas discapacitadas en Colombia se convertirá en Ley de la Republica.
El autor de la iniciativa es el senador Juan Manuel Galán, la ponencia fue presentada por la representante a la Cámara, Clara Rojas; ambos miembros del Partido Liberal.
En la redacción del texto participó el abogado José Alejandro Hoffman, quien dialogó con AL DÍA y explicó el alcance de la nueva norma.
“Esta Ley reforma la actual Ley Antidiscriminación que solo sancionaba la discriminación por raza u orientación sexual. La reforma que presentamos sirve para proteger los derechos de los discapacitados en todo el país”.
Para Hoffman la reforma “no tiene un enfoque punitivo, como lo han dicho algunas personas, ya que su objetivo es proteger el acceso de una persona a un derecho fundamental en razón de su discapacidad, es una norma preventiva”, explicó.
Pero la realidad es que si tiene dientes, y bien afilados, porque castiga a los discriminadores con cárcel de 1 a 3 años y les impone multas que pueden variar entre los $6 millones y $9 millones.
Hoffman, quien es discapacitado y lidera la lucha por los derechos de las personas en situación de discapacidad, puso como ejemplo de violación a la Ley en los colegios que no permiten el ingreso de discapacitados por su condición especial.
El escandalo de la pastora del Mira
El senador Juan Manuel Galan, autor del Proyecto de Ley, señaló que la iniciativa corrige el olvido en el que había incurrido la Ley Antidiscriminación ‘original’, que solo sancionaba a quienes discriminaran por razón de raza, nacionalidad, sexo u orientación sexual, pero no por discapacidad.
La Ley ‘original’ a la que se refiere Galán fue promovida en 2011 por el Movimiento Mira, el brazo político de a Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional.
Paradójicamente en 2013 se difundió un video de María Luisa Piraquive, máxima líder de esa comunidad cristiana, asegurando que los discapacitados no podían predicar en esa iglesia.
“Si ven el predicador sin un brazo, (los fieles) no se van a agradar mucho. Por la conciencia, otros dirían por estética, no lo ponemos en el púlpito (...). El Espíritu Santo nos enseñó que el predicador debe ser una persona que tenga todos sus miembros. El minusválido o el que perdió un brazo sabe que no puede pasar al púlpito”, le dijo en ese entonces Piraquive a un grupo de seguidores.
El video de la pastora ser volvió viral y desató una polémica sobre la discriminación a los discapacitados que desembocó en que la Fiscalía abrió una investigación, que sigue vigente, en contra de la Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional por lavado de activos.
Y en las elecciones de 2014 el Mira perdió las tres curules que tenía en el Senado y salvó la personería jurídica porque logró rescatar tres escaños en la Cámara de Representantes.
‘Que no se quede en letra muerta’
Heriberto Rodríguez González, de 56 años, sufrió de poliomielitis cuando tenía dos años y la pierna izquierda le quedó afectada; para rematar a principios del año pasado se accidentó cuando iba de parrillero en una moto y se fracturó la otra pierna.
Actualmente vive de la ‘liga’ que le dan sus amigos que trabajan en empresas de transporte en Barranquilla y Soledad. Con la inminente sanción de la reforma a la Ley Antidiscriminación espera que se le facilite el camino para obtener una pensión por invalides.
Adolfo Isaac Peñate Yépez, quien perdió sus dos piernas por la diabetes, también espera que la nueva Ley le facilite el acceso a los subsidios que entrega el Estado. “Sería bueno que en la ciudad construyeran más rampas para poder moverme en mi silla de ruedas”, pidió.
