El Heraldo
Colombia

Así defraudan a Colpensiones y a los que esperan una jubilación

Luego de frenar un fraude por $15.500 millones, el jefe de Control interno le explicó a EL HERALDO varias modalidades de fraude detectadas contra la entidad estatal y usuarios que tienen la ilusión de lograr una pensión.

BOGOTÁ. Al menos siete modalidades de fraude ha identificado Colpensiones en su contra y en contra de usuarios que, tras haber trabajado toda la vida, sueñan con pensionarse.

Diego Ortega Rojas, director de la oficina de Control interno disciplinario de Colpensiones, explicó a EL HERALDO las tretas que usan los estafadores para robarles a los usuarios o al Estado, y señaló que por modificaciones en el modelo de operación del liquidado Instituto de Seguros Sociales, ISS, que le dio paso a Colpensiones, han logrado “identificar y prevenir” muchos de estos casos.

Desde que Colpensiones entró en operación el objetivo fue manejar un “desarrollo funcional” bajo premisas del gobierno corporativo, es decir seguridad, transparencia, legalidad y eficiencia, indicó Ortega. Por eso acabaron los centros de decisiones regionales y centralizaron en Bogotá los procesos para resolver las solicitudes pensionales.

También modificaron las funciones. “Hoy una pensión se reconoce tras un trámite en el que intervienen varias áreas, lo que permite hacer un mayor control”, destacó el directivo.

Diego Ortega Rojas, director de Control interno de Colpensiones, muestra uno de los documentos falsos.

Evitan pagar millones

Fue así como la entidad logró detectar un fraude y evitar el desembolso de 15.500 millones de pesos, a través del seguimiento a sus aplicativos informáticos.

Ortega explicó a EL HERALDO que, en una de las modalidades de fraude, hay particulares que ubican a usuarios, especialmente con edad avanzada y por encima del límite legal que es de 60 años, quienes tienen la ilusión de una pensión. “En este país todo el mundo trabaja o ha trabajado, pero eso es distinto a que esas personas hayan cotizado, y la gente por haber trabajado asume que ya tiene un derecho”, indicó el funcionario.

Tras abordar a estas personas, los tramitadores les piden los datos con el argumento de que van a averiguar si pueden acceder o no a la pensión. Los interesados entregan sus cédulas y los estafadores contactan a los analistas de historias laborales, que son particulares contratados por Colpensiones para atender el atraso que heredaron del ISS.

Como estos analistas tienen acceso a los aplicativos, ubican la historia laboral y la modifican. Así, un usuario que tiene 300 semanas o 100 semanas –cuando el requisito es el de 1.300– ve que de repente cumple el requisito para pensionarse.

“Detectamos eso antes de que se expidiera el acto administrativo y antes de que el usuario se notificara y antes de que con la notificación cobraran. Logramos parar así el millonario desembolso que hemos denunciado”, subrayó el director de Control interno.

Cuántas personas están involucradas y en qué regiones cometieron los ilícitos le preguntó EL HERALDO, ante lo cual el funcionario manifestó que la información “está bajo reserva”.

Pero afirmó que los analistas de historias laborales involucrados “ya no hacen parte de Colpensiones”.

“Empezamos a identificar estas maniobras fraudulentas desde principios de 2014, en Bogotá, el occidente del país, Antioquia y en la Costa Atlántica donde tenemos puntos de atención al ciudadano en Riohacha, Santa Marta, Valledupar y especialmente en Barranquilla”, dijo Ortega.

Documentos falsos

 Además de parar el intento de robo en su contra, Colpensiones ha acompañado, al menos, 350 procesos penales en los que los tramitadores engañaron a ciudadanos con documentos falsos.

Simulando que los papeles fueron emitidos por Colpensiones, u otras entidades, se los entregan a los interesados a cambio del pago de entre uno y cinco millones de pesos. Ortega explicó que además los estafadores, que simulan tener acceso a información privilegiada de Colpensiones, les piden a las personas timadas sumas de dinero, haciéndoles creer que, a través de supuestos abogados, van a lograr pensionarlos.

“Acá no se afecta patrimonialmente de Colpensiones sino al usuario, entonces nosotros acompañamos a estas personas en las denuncias”, precisó Ortega.

En un chat que obra como prueba dentro de uno de los procesos, al cual tuvo acceso EL HERALDO, se puede ver cómo un tramitador, que había logrado engañar a un grupo de personas, les cobraba una parte de una supuesta remuneración por “daños y perjuicios”.

“(…) le informo que nos van a pagar una remuneración por los daños y perjuicios que nos ocasionaron, el valor por cada persona son 35 millones 500 mil pesos”, escribió desde un celular una persona identificada como Pedro Cifuentes. Luego, les anunció cuál sería su parte: “Les voy a pedir a todos la ‘colita’, los 5 millones 500”.

Carta falsificada

Otra modalidad de fraude la cometen mediante un documento falso que parece ser emitido por Colpensiones. En este le exigen a los incautos un pago por el supuesto trámite pensional.

Al respecto, el directivo de Colpensiones indicó que en marzo de 2013, cuando arrancaban funciones, detectaron que los estafadores bajaban las historias laborales y le decían a la persona interesada que “no tenía derecho a la pensión porque le faltaban unas semanas”, pero le dejaban abierta una posibilidad. Le hacían creer que sí cumplían otros supuestos requisitos y se daba una negociación, por intermedio de un apoderado, por valor de 4 millones 800 mil pesos, para que el afectado supuestamente pudiera acceder a la pensión. “El apoderado, que era el tramitador, recibía la plata y se desaparecía”, cuenta Ortega.

Como parte de otra estafa, le mandan a la víctima, previa identificación, una carta con los nombres de funcionarios reales, con logos perfectos de Colpensiones y la firma del gerente nacional de Defensa Judicial, cargo que también existe en la entidad.

En la misiva le citan al estafado una resolución y le dicen que para completar el número de semanas requeridas para pensionarse debe pagar las semanas en mora. “Entonces le dicen a la persona que le faltan 111 semanas, que valen 4 millones 985 mil pesos, y la gente paga”, señaló Diego Ortega.

Gemelean resolución

En otra modalidad crean también un documento falso con el que imitan un acto administrativo de Colpensiones, en el que éste otorga una pensión. El documento aparece firmado por una agente de servicio y en el mismo escanearon la firma de la gerente de Reconocimiento.

El director de Control Interno explicó que el ISS le dijo a Colpensiones que tenía represadas unas 80 mil solicitudes de pensión, con corte al 30 de septiembre de 2012, pero después encontraron que eran 347 mil.

Eso implicó que Colpensiones no podía contestar las miles de solicitudes que eran radicadas porque estaba atendiendo los trámites represados del Seguro Social, que la Corte Constitucional ordenó atender primero.

“Los estafadores empezaron a gemelear un acto administrativo nuestro, concediendo el reconocimiento de pensión, pero ese acto administrativo lo firmaba una agente de servicio, es decir, una persona que atiende usuarios.

Entonces le decían a la víctima: ya salió la pensión, le entregaban el documento y la persona pagaba, pero al llegar a Colpensiones la realidad es que era falso”, explicó el funcionario.

Tras las pesquisas, dijo que formularon las denuncias y adelantan un trabajo coordinado con la Fiscalía y el Centro cibernético de la Dijín.

“Tenemos una investigación bastante avanzada sobre este asunto y pronto habrá resultados”, puntualizó.

Otro caso: falsedad con mala ortografía

La última modalidad, que va contra las personas más humildes e inocentes, o las de mayor edad, corresponde a “unas burdas falsificaciones de resolución, donde escriben ‘Colpenciones’ con c y usan expresiones como ‘acercasen’ o ‘vejes’ con s”, explica el funcionario. Allí les dicen que si “cotizaron un promedio de 22 a 24 años horas extras y festivos”, podrán reclamar un “retroactivo o bonificación como pensionado por vejez de 27 millones 900 mil pesos”, pero les advierten que solo podrán reclamarlo quienes estén “a paz y salvo con los impuestos mencionados en total de 1 millón 240 mil pesos”.

Señala Diego Ortega Rojas, director de la Oficina de control interno disciplinario de Colpensiones, que “la gente que ha trabajado toda la vida dice ‘yo caigo ahí’, y el viejito firma. La víctima en este caso era un señor que no tenía plata, y se fue donde los parientes a buscar joyas para entregárselas a los bandidos”.

Un registrador de Malambo

Cuando un trabajador recibe de Colpensiones el acto administrativo de pensión debe ir a la entidad financiera que le indican y mostrar su cédula, para que desde el banco verifiquen los datos. En caso de no coincidir se genera una alerta que ocasiona la suspensión del pago.

“Un usuario en Malambo fue el año pasado con su apoderado a un banco y la entidad generó la alerta por algo que no estaba bien, entonces presentaron la reclamación y el apoderado hizo un show en la caja. Pero la fecha de expedición de la cédula de quien había sido pensionado no correspondía con la fecha de nacimiento, por lo que contactamos a la Dijín, que le tomó las huellas al usuario e inició las labores de verificación. La sorpresa fue que la información imprecisa también estaba en la Registraduría Nacional: encontramos que hay un proceso penal en Bogotá contra un registrador municipal a quien sacaron por estar ofreciendo cédulas originales que eran falsas en su contenido”, narró Diego Ortega.

Caso alertado desde Barranquilla

Hubo un caso en Barranquilla donde un trabajador cumplía el requisito de las semanas para pensionarse, es decir que empezó desde joven a trabajar, pero no tenía la edad suficiente para la pensión porque debía tener 60 años de edad (o 62 en el régimen completo).

Esta persona expuso su caso a tramitadores que le pidieron la cédula y le dijeron que necesitaban ajustar su fecha de nacimiento.

“El señor, al tercer día, sin poder dormir, le contó a su esposa y la señora le pegó la ‘vaciada’ de este mundo. Esta persona regresó a donde el tramitador a cancelar el proceso, pero este le dijo que ya había radicado los papeles, y amenazó al señor”, indicó Diego Ortega, directivo de Colpensiones.

El trabajador denunció la situación y Colpensiones logró comprobar que el documento de identidad que presentaron tenía la fecha de nacimiento adulterada, porque el usuario nació en 1961 y comenzó a trabajar a los 18 años en una reconocida empresa barranquillera en 1979, pero los documentos contenían una fecha de nacimiento de 1951 y la expedición en 1979. “Es muy raro que usted espere hasta los 28 años para tramitar la cédula, así como para empezar a trabajar”, destacó Ortega.

Recomendaciones para usuarios

Consultar su historia laboral, disponible en los puntos de atención al ciudadano y en la página de internet www.colpensiones.gov.co.

No se necesita, para ningún trámite, de un tramitador o abogado que se ponga a hacer diligencias que no corresponden.

 

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