¿Quién salva el Lago del Cisne?
Así se ve este cuerpo de agua, que registra una reducción del 65%, según la CRA.
Lucelis Tobar, sentada a escasos metros del lago del Cisne, desde su puesto de venta de ‘coco frío’, lamenta el estado actual de este cuerpo de agua, el cual es un atractivo para los visitantes que transitan por la antigua vía que comunica a Barranquilla y Puerto Colombia. Y no es para menos, el espejo de este cuerpo de agua se ha reducido en un 65% de su superficie total, de acuerdo con cálculos de la Corporación Autónoma Regional del Atlántico (CRA).
Tobar cuenta que la falta de turistas la ha sentido en sus ingresos diarios. “Para diciembre, cuando se veía más lleno el lago, me podía hacer $100 mil en un día, ahora escasamente llego a $20 mil. Ayer (el jueves), unos extranjeros pasaron por acá y decían que era una lástima que no cuidaran un sitio como éste”, agrega, mientras lleva a una de sus cuatro hijas a un corral que tiene al lado de la cava donde refrigera los cocos.
El director de la CRA, Alberto Escolar, explicó que la medición sobre el lago está basada en una imagen satelital tomada en abril y que este porcentaje podría ser “mayor”, si se tiene en cuenta la capacidad de agua que tiene el Cisne, el cual tiene una extensión de 56 hectáreas y una profundidad máxima de dos metros.
Pero no es la primera vez que gran parte del lago queda convertida en un campo árido. Hace nueve meses este medio denunció la ‘agonía del Cisne’, dado que nivel del agua del mismo no superaba los 40 centímetros de profundidad.
“El periodo más crítico fue en agosto del año pasado, cuando estuvo reducido en un 80%, y aún no hemos llegado a ese punto. Luego, con la llegada de las lluvias se volvió a llenar después de octubre”, recordó el funcionario.
SIN ABASTECIMIENTO
Los niveles de El Cisne dependen de dos aspectos: las lluvias y el ingreso de agua que proviene desde el Arroyo León. La temporada de seca, que comenzó a finales de enero y que, según el Ideam, se extendería hasta este mes, ha ocasionado que la primera condición no se dé. La entrada de agua desde el arroyo tampoco es posible porque el caudal se desvía antes de llegar al lago.
Para el gobernador José Antonio Segebre, el cuidado de estos cuerpos de agua “no ha sido tan adecuado” en el Atlántico. “Hay que buscar hacerle una protección especial y permanente para no lleguen a estas condiciones. Lo que hemos hecho no ha sido tan adecuado, me incluyo en ello porque soy presidente de la CRA”, puntualizó.
Ante la actual situación, y teniendo en cuenta que hay unas obras de mitigación que aún no comienzan, Alberto Escolar analizó los posibles efectos de la sequía del cuerpo de agua. A nivel de fauna, sostuvo que esta es migratoria y se desplazaría a otros puntos; sobre la flora aseguró que este entorno tiene las características de bosque seco tropical que se “adapta a condiciones extremas”. Escolar consideró que el mayor impacto sería a nivel paisajístico.
EJECUTADO Y POR HACER
La Corporación Autónoma Regional realizó entre noviembre del año pasado y marzo la remoción de sedimento en cinco hectáreas del lago. Según el director, estos trabajos permitieron el retiro de 30.000 metros cúbicos de residuos. La obra costó $925 millones y fue ejecutada por la firma Arquitectura e Ingeniería Macroproyecto S.A.S., cuyo representante legal es Cristóbal Cantillo González.
El funcionario aseguró que, de acuerdo con los protocolos, el sedimento retirado fue llevado a zonas ubicadas dentro de un perímetro de cinco kilómetros a la redonda del Cisne. “Menos de un 20% fue depositado en zonas de inundación del zoocriadero San Francisco”, agregó.
En cuanto al proyecto que fue anunciado en abril pasado, que incluye un sistema de bombeo de agua desde el Arroyo León al lago, con un previo tratamiento del líquido, dijo que están en proceso licitatorio y que el contrato debe comenzar a ejecutarse “en julio” para, “en agosto”, estar abasteciendo el cuerpo de agua. “En el peor de los escenarios, en 60 días debe estar lleno nuevamente”, aseguró.
Otro proyecto
Paralelo al sistema de llenado artificial, Alberto Escolar señaló que dentro del presupuesto de la obra también se asignarán recursos para el “embellecimiento” de la llamada “ventana” del lago, que se encuentra ubicada cercana al centro religioso del padre Hollman.
“Planeamos que el sector del letrero se convierta en una ronda ecológica que permita acceder al lago, bajarse para sentarse, pararse sobre un malecón (...). Que haya un punto de observación y acercamiento, respetando la ronda del lago”, apuntó.
Además, buscan la definición de la ronda hídrica la cual va a arrojar una reglamentación sobre usos de suelos en la zona.
