El Heraldo
Según el Damab, muchos de los 46 árboles talados en la carrera 51B estaban en mal estado por efectos del comején. Orlando Amador
Barranquilla

Polémica por la tala de 46 árboles sobre la carrera 51B

El Damab asegura que autorizó el retiro de matarratones, almendros y robles, entre otras especies, desde agosto de 2013.

La tala de 46 árboles, que durante años sirvieron con su sombra a los transeúntes de la carrera 51B entre la calle 87 y Circunvalar, donde están siendo finalizadas las obras de ampliación de la vía, generó una ola de protestas entre grupos de ambientalistas y muchos vecinos del sector.

Ayer se observaban trozos y ramas de especies como mango y matarratón que fueron cortados por la firma contratistas de las obras, Valorcon S.A., previa autorización del Damab.

La directora del Departamento Técnico Administrativo de Medio Ambiente de Barranquilla –Damab–, Jackeline Reina, explicó que los árboles fueron retirados porque “interferían con la obra que se realiza sobre la carrera 51B”.
Expuso que las raíces podían ocasionar futuros problemas con las losas o las tuberías subterráneas. Argumentó que no fueron replantados porque algunos estaban en mal estado por efectos del comején.

La funcionaria indicó que la entidad a su cargo expidió el 9 de agosto del 2013 un acto administrativo de aprovechamiento forestal, a través de la resolución 1311, con la que autorizó a la firma Valorcon S.A., el retiro de algunos árboles.

“Inicialmente pensamos que se necesitaban talar 135 de los 337 árboles que hay en la zona de influencia de los trabajos, pero hasta el momento van 46 y es probable que solo llegue a 54”, manifestó.

En reposición de cada árbol que sea retirado, la entidad solicitó al contratista de la obra la siembra de cinco árboles, es decir, si son cortados finalmente 54, la empresa deberá devolver a la ciudad 270 árboles de mínimo 3.50 metros de altura, los cuales pueden ser de mango, olivo, trébol, almendro o roble morado.

Por redes sociales, ciudadanos expusieron su inconformidad ante la tala realizada y cuestionaron si la administración iba a plantar en reposición unas palmeras, recordando las recomendaciones realizadas por expertos en el pasado sobre la urgencia de sembrar árboles autóctonos para mitigar el efecto del cambio climático.
  
A esto, la directora agregó que el objetivo está puesto en plantar árboles frondosos que proporcionen sombra.

Reacciones. David Montero, miembro de la organización ciudadana La Ciudad Verde, entiende que dicha tala fue necesaria porque no estaba permitiendo el desarrollo de la obra a lo largo de la 51B. “Nos duele que hayan tenido que talar estos árboles, pero entendemos que es un mal necesario”.

Montero comenta que La Ciudad Verde liderará a través de las redes sociales una campaña para que los barranquilleros estén atentos de la anunciada siembra de los árboles y del mantenimiento que deben realizar a los mismos.

Por su parte, Josefina Daza, feligrés de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, que queda sobre la carrera 51B con calle 103, expresa que el retiro de aquellos árboles enfermos los venía solicitando desde hace tiempo al Damab.

“Nos pusimos contentos, fue una oración contestada por Dios. Esos árboles estaban en muy mal estado y tenían afectado a nuestro templo con el comején”, señala.

Fernando Avendaño, presidente de la Asociación de Ingenieros Agrónomos del Atlántico, expresó su preocupación por el tiempo que tomará recuperar ese sector bajo las condiciones ambientales que ofrecían las especies retiradas. “Lo que sea plantado, tardará meses en devolverle al sector su condición anterior”, dijo.

Definió como “una decisión grave”, desde el punto de vista paisajístico y ambiental la tala de los 46 árboles. “No se buscó la manera de causar el menor impacto posible en el sector. Se pudo haber construido un talud o una barrera que evitara que la raíz creciera y chocara contra las redes subterráneas”, precisó Avendaño.

La directora del Damab afirmó que a comienzos de marzo algunos funcionarios de la Secretaría de Movilidad conversaron con miembros de la comunidad vecina para anunciarles la tala.

Agregó que el nuevo material vegetal será plantado cuando comience la temporada de lluvias. Según el cronograma, 135 serán ubicados en el corredor de la carrera 51B, y que falta por definir en qué punto quedará el resto.

La funcionaria puntualizó que la firma Valorcon tiene la responsabilidad de “dejar en buen estado los árboles y velar por el crecimiento de estos”.

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