Pilotaje del puente Pumarejo se adentra en el río Magdalena
Este martes realizaban trabajos en tres pilotes dentro del agua. El megaproyecto tendría un avance de ejecución cercano al 14%, de acuerdo con información de Invías.
La construcción de las bases que sostendrán el paso sobre el río entre Atlántico y Magdalena está cada vez más avanzada. Así lo reconocen quienes acostumbran a pasar por el actual puente Laureano Gómez, más conocido como Pumarejo, junto al cual se erige la nueva obra, que cuesta unos 650.000 millones de pesos.
Helena Gámez vive en Palermo (Magdalena) hace más de 30 años. En la mañana de este martes de atraviesa, de la mano de su esposo, José Linares, los más de 1.400 metros que tiene el puente, el cual fue construido a mediados de los años 70. Casi al llegar al lado Atlántico de la estructura se detienen para mirar hacia el río. Su atención es atraída por tres planchones. Sobre uno de ellos está una grúa roja que fue utilizada para clavar los tres primeros pilotes dentro del río Magdalena.
“Vemos que van bien, adelantados, con esos trabajos. Es algo muy bueno, creo que el puente nuevo va a servir mucho para el progreso de la ciudad, del departamento”, comenta Helena, quien sigue su paso de la mano de Libardo, hasta bajar de la estructura, donde se suben a un bicicoche con rumbo al sector de Simón Bolívar, en Barranquilla.
El nuevo Pumarejo será una estructura atirantada y se construirá paralela a la actual, con 2.250 metros de longitud en el eje principal y 990 metros de viaductos en conexiones y accesos.
EN PORCENTAJE. A finales de la semana pasada, el director técnico de Invías, Luis Roberto D'Pablo, reportó avances del 14% de la cimentación del pilotaje. “Nos comunicó el contratista que ya iniciaron los cimientos en agua, para comenzar estas pilas principales de un diámetro de 2.8 metros”, explicó. Las obras del puente, que comenzaron hace cerca de cinco meses, estarán listas en agosto del 2018, de acuerdo con el compromiso que hizo el Consorcio SES Puente Magdalena (conformado por las firmas Sacyr, Esgamo y el Invías), encargado de la construcción.
La megaobra, de 2 kilómetros de longitud, contará con 27 ejes que contendrán los 250 pilares que, de acuerdo a su ubicación, tendrán diámetros de entre 1.3, 2 y 2.8 metros. Las profundidades variarán de 35 a 60 metros.
En la acera contraria de donde caminaba Helena con su esposo, estaba Anuar Rodríguez, recostado a una de las barandas de la estructura, paciente, esperando el movimiento de la caña para sacar su tercer pescado de la mañana. Aún tiene puesto el casco, y mantiene al lado su bicicleta, útil en esas pedaleadas desde su casa, en el sector de Bella Arena, a unos 5 kilómetros.
“Me parece que van bien. Hace tres días también estuve por acá y no había visto que ya estaban poniendo esos tubos (pilotes) en el agua”, sostuvo, al tiempo que recogía el hilo de pescar, sin la suerte de que en esta ocasión viniera enganchado un bagre, jurel, chivo o mojarra, “lo que más se ve en esta parte”.
Y es que este viejo puente, que alcanza una altura máxima sobre el nivel de las aguas del canal de navegación de 16 metros, no solo es importante para los cerca de 5.000 vehículos que pasan a diario por él, sino para muchos que, por años, han sacado dividendos del mismo.
La estructura que está en construcción contará con dos calzadas de tres carriles cada una, dos andenes peatonales de 2 metros cada uno, dos carriles de ciclorruta de 1.50 metros cada uno, un gálibo (altura) de 45 metros que permitirá la circulación de embarcaciones tipo Handy Size, que representan más del 70% del transporte marítimo internacional.
Hasta ayer, se notaban al menos cinco bases con pilotes que comienzan a dar forma a esta obra, que, según el Gobierno Nacional, es “una de las más importantes para la competitividad y modernización de Barranquilla”.
