El Heraldo
En Barranquilla hay más de 150 mil motociclistas, y según Funalcim, más del 20% se dedica al mototaxismo. La gráfica registra una ‘nevada’ en la calle 34 con carrera 38. Cristian Mercado
Barranquilla

El mototaxismo se toma de nuevo a Barranquilla

Secretaría de Movilidad dice que sí realiza controles. “Hemos venido acompañando para combatir la ilegalidad”: Ministerio de Transporte.

El mototaxismo se tomó de nuevo varios puntos y vías de la ciudad. De hecho, en algunos sectores prohibidos para este tipo de transporte ya es común ver funcionar ‘nevadas’.

A pesar de que se ha convertido en el sustento de muchas familias y una solución para aquellos sectores que no cuentan con transporte público eficiente, el mototaxismo genera congestión, invasión de andenes y espacio público, problemas de inseguridad, accidentalidad y aumento de emisiones contaminantes.

Por ello, cuando en septiembre de 2009 el entonces alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, expidió el decreto 0924 mediante el cual prorrogaba la vigencia de las medidas de restricción adoptadas a través del decreto 0179 de 2006 que prohibió el mototaxismo, las reacciones no se hicieron esperar y las protestas de los mototaxistas se registraron con frecuencia.

Las manifestaciones en contra de la medida desaparecieron. Empezó a regir el decreto 0091 de febrero de 2011 que prohíbe dicha actividad en Barranquilla y con el cual se empezaron a tomar medidas de restricción al transporte informal.

“El cáncer que está consumiendo al gremio de los taxis se llama informalidad e ilegalidad. Dentro de esas dos modalidades que no son homologadas, el principal es el mototaxismo o ‘motorratones’ como lo llaman en otras ciudades”, dijo Jorge Guerrero, presidente de Sinchotaxis.

En opinión del dirigente gremial la situación en Barranquilla se ha desbordado y así quedó evidenciado en una video-conferencia que sostuvieron recientemente con el general Carlos Ramiro Mena, director de Tránsito y Transporte.

Sostuvo que las medidas adoptadas de restricciones por cuadrantes de mototaxismo han sido olvidadas y la actividad “sigue creciendo a sus anchas”.

Según Guerrero esta situación contribuye a la inseguridad porque el “68% de los delitos, sean robos, fleteos o asesinatos se hacen utilizando una motocicleta”, dijo al señalar que el mototaxismo de nuevo se le salió de las manos a las autoridades y no hay ningún control.

Servicio irregular

Entre los puntos donde hay ‘nevadas’ de mototaxis está la calle 72 con carrera 38; la Cordialidad con 24; calle 72 con carrera 54; en las zonas bancarias del Centro y Norte, entre otros.

“Las motos no entraban con pasajeros al centro y vemos que ahora sí”, dijo Guerrero.

La ministra de Transporte, Natalia Abello sostuvo que el mototaxismo es una forma irregular de prestación del servicio público de transporte que debe ser controlado por el ente territorial, en este caso la Alcaldía.

Según Abello, el Gobierno Nacional ha venido acompañando a los municipios para combatir la ilegalidad y la piratería. “Este año estamos contratando un estudio de caracterización del mototaxismo en Colombia, esta vez regionalizado. De igual forma, lanzaremos el programa nacional de estándares del uso de la motocicleta”, dijo.

El secretario de Movilidad del Distrito, Luis Pulido,  aseguró que no es la primera vez que se discute el tema de los motociclistas como transportadores ilegales. “Es un riesgo, este no es un transporte seguro, las cifras lo demuestran, pero no es nuestra competencia, sino del Congreso o del Ministerio de Transporte que tienen la potestad de decidir legalizarlo o no. Este es un fenómeno que se vive en todas las capitales de la Costa Caribe”, dijo.

Sostuvo además que la Alcaldía de Barranquilla en conjunto con la Secretaría de Movilidad implementaron medidas de control a este problema, modelo que, según él, ha sido replicado en Santa Marta, Montería, Cartagena y recientemente Valledupar.

Con el Decreto 091 de 2011 se buscó reglamentar la circulación de este tipo vehículos para proteger la salud, la vida de conductores, pasajeros y peatones y disminuir los niveles de accidentalidad, muertes y heridos que afectan a personas que utilizan estos vehículos como medio de transporte de pasajeros.

Según Pulido, luego de este proceso se realizó una caracterización de los motociclistas y a esta convocatoria asistieron 3.875 conductores de motos, de estos 2.828 se declararon mototaxistas y según la base de datos del Sisben 1.828  residen en Barranquilla.

Pulido sostuvo que sí han desarrollado actividades de control, prevención y regulación. Que una muestra de ello es que en lo que va de 2015 han impuestos 2.044 comparendos a motociclistas por transitar en sitios o en horas prohibidas por la autoridad competente; 153 inmovilizaciones por alcoholemia, 1.070 por conducir sin portar la licencia; 959 comparendos por no realizar la revisión técnico-mecánica y 527 por estacionar en sitios prohibidos.

Según un análisis de la circulación de motos en el Distrito de Barranquilla, realizado en noviembre de 2013, para 2040 se estima que el número de motos en Colombia pasará a 12,9 millones, frente a los 2,4 millones de 2010. Los ocupantes de motos son los actores viales con mayor porcentaje de heridos en los siniestros registrados en Barranquilla, y en aforos vehiculares realizados en 85 intersecciones de Barranquilla, se encontró que las motocicletas conforman un 23,5% del total de vehículos.

PROBLEMA SOCIAL

Mario Martínez, presidente de Funalcim, entidad que agrupa a motociclistas y mototaxistas  de Barranquilla, dijo que la solución a este problema no es nada fácil, puesto que las oportunidades laborales son pocas.

“Muchos mototaxistas hacen al día hasta 30 carreras y el precio es económico, pues una carrera cuesta entre 1.000 y 2.000 pesos”, explicó y sostuvo que la gente también utiliza este transporte porque en “altas horas de la noche el servicio de transporte no llega a muchas zonas, pero las motos sí”.

Martínez argumentó que las ofertas labores propuestas por el gobierno distrital a través del Centro de Oportunidades no funcionaron. Y que sí hay control por parte de las autoridades, pero cada año aumenta el desempleo y en Barranquilla crece la informalidad. “Investigue si hay mototaxis en ese centro de oportunidades”, cuestionó.

Según Martínez alrededor de tres mil familias en la ciudad derivan su sustento del mototaxismo porque con la actividad ganan hasta casi dos salarios mínimos mensuales.

ANÁLISIS.Informalidad: Causas estructurales. Rocío Mendoza, Directora de Barranquilla Cómo Vamos

La reciente encuesta de Calidad de Vida realizada por el programa Barranquilla Cómo Vamos, nos permitió conocer que aproximadamente el 9% de los barranquilleros con alta movilidad, es decir, los que estudian o trabajan fuera del hogar, utiliza el transporte informal como el principal medio para desplazarse. La anterior proporción es significativa cuando se tiene en cuenta que la preferencia por el Transmetro en usuarios con alta movilidad está en el 10%. El uso de mototaxis puede estar reflejando deficiencias en la cobertura del transporte público, los vacíos que se generan son llenados por formas ilegales de movilidad. Sumado a lo anterior, la solución económica que representa para muchas familias este tipo de actividades puede estar incentivando la práctica del mototaxismo como un oficio. Además de la restricción y control, la generación de alternativas de trabajo o estudio para quienes lo ejercen debe plantearse como medida concomitante. Urge un diagnóstico integral en movilidad en la ciudad y los municipios del Área Metropolitana para analizar este fenómeno.

Directora de Barranquilla Cómo Vamos

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