El Heraldo
El agente Wilson José Benítez de la Hoz y el teniente Flóver Argeny Torres Sánchez. Archivo
Judicial

Se inició juicio a policías prófugos por desaparición de joven de Palmar de Varela

EL HERALDO conoció que por este caso, además, un juzgado de Barranquilla admitió la demanda de la madre de la víctima, enferma de cáncer y quien busca a su hijo desde hace 15 años.

En el Juzgado Único Penal Especializado del Circuito de Barranquilla, presidido por Jorge Torregrosa, el mismo juez que le concedió la libertad al hoy prófugo exsenador Dieb Maloof, se inicia esta mañana el juicio contra los expolicías, el teniente Flóver Argeny Torres Sánchez y el agente Wilson José Benítez de la Hoz, quienes también huyen de la justicia y estarían presuntamente implicados en la desaparición forzada de Boris Enrique Pizarro Insignares, un joven de 27 años, oriundo de Palmar de Varela, de quien no se sabe nada desde el 21 de septiembre de 2000.

Los antiguos miembros del Gaula, quienes de acuerdo a las investigaciones de la Unidad de Desplazamiento Forzado y Desaparición Forzada de la Fiscalía, son los verdugos de Pizarro, han sido señalados por dos paramilitares desmovilizados del Frente 'Pivijay', del Bloque Norte de las AUC.

Los excombatientes Alberto Martínez Macea y Javier Sánchez Arce, quienes se acogieron a sentencia anticipada por estos hechos -por los que también fuera condenado por el Tribunal de Justicia y Paz de Bogotá el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso-, narraron al respecto: "llegaron tres agentes del Gaula en compañía de dos miembros de las AUC, donde ingresan a Palmar de Varela y se llevan a Boris Pizarro como integrante de la guerrilla de las Farc y que tenía unos planes para secuestrar en San Andresito, dándose cuenta que no era el que estaban buscando" (sic).

La madre de la víctima, Rosa Insignares, busca a su hijo desde hace 15 años, cargando en su cartera un retrato viejo fotocopiado y luchando contra un cáncer igual de doloroso.

Lo único que sabe la señora Rosa es que a Boris, tras dispararle, los paramilitares y policías le rajaron el estómago y le metieron piedras antes de tirarlo al río Magdalena.

A Torres se le investiga, además, por el homicidio del profesor de la Universidad del Atlántico, Jorge Adolfo Freyter Romero.

Admiten demanda

EL HERALDO conoció que el Juzgado 7 Administrativo del Circuito de Barranquilla admitió una demanda de reparación presentada por los familiares de la víctima, entre ellos su madre, Rosa Insignares, quienes no saben desde hace tres lustros del paradero de los restos de su ser querido.

Los familiares del joven de 27 años han buscado su cuerpo pero, según los paramilitares, a la víctima se echaron piedras en el estómago para que no flotara en el Río Magdalena, donde fue arrojado a la altura de Salamina, Magdalena.

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