Campesinos de Córdoba exportan papayas a Canadá
Ya se han enviado 100 toneladas de la fruta fresca a este país. Dicen que los controles al producto son muy estrictos en el exterior.
Las asociaciones de campesinos del alto Sinú empezaron a exportar papaya hacia Canadá, proveniente de cultivos ubicados en la zona rural de Valencia, en la subregión del alto Sinú.
Desde octubre hasta la fecha se han enviado cuatro contenedores que suman un total de 100 toneladas, según lo indicó Francisco Osorio, gerente de la compañía Frandi Group Corp, que lleva la papaya a los mercados canadienses.
El empresario dijo que la meta es llegar a exportar diez contenedores semanales, una vez se ajuste el tema de la manipulación del producto desde la recolección hasta el proceso de empaque, que permita la conservación de la fruta sin riesgos a que se dañe.
“Así las cosas estaríamos enviando 220 toneladas semanales de papaya”, precisó Osorio, líder del proyecto desde que inició hace varios años.
Las exportaciones a Canadá salen por el puerto de Santa Marta, considerado el único medianamente preparado para recibir las frutas colombianas frescas, porque tiene cuartos fríos.
Agregó que el convenio con la compañía Doll que solo transporta frutas permite mejorar el envío en bodegas de los barcos hasta Canadá.
El traslado normal a Canadá, específicamente al puerto de Pensilvania, debe tardar máximo 12 días. Sin embargo, el primer contenedor desde Valencia, Córdoba, demoró 26 días, porque después de llegar a territorio norteamericano debieron enfrentar una serie de inconvenientes, entre ellas la duda de las autoridades que creían que se trataba de droga camuflada en papaya.
El tercer contenedor debió llegar la semana anterior y el cuarto va en viaje, para llegar a comienzos de diciembre.
Tony Pacheco, presidente de la Asociación de Productores Agroecológicos del alto Sinú, dijo que están en el proceso de adecuación de una bodega que consiguió la compañía administradora, a la cual se le hacen actualmente las obras necesarias para cumplir con los requisitos sanitarios que exige el ICA.
Señaló que por tratarse de un producto colombiano y del alto Sinú, son excesivos los controles que hacen las autoridades en cada puerto, lo que aumenta el riesgo de algún contagio con virus.
