Deportes

Pacheco, Ortega y Narváez dan la cara por la pelea

Los tres integrantes del plantel fueron los únicos que accedieron a hablar ante los medios del penoso hecho protagonizado el pasado miércoles en el Metropolitano.

La marea rojiblanca volvió a elevarse. Aguas turbulentas azotan nuevamente a los tiburones, que en su desespero por devorar ahora se atacan entre sí. La poca calma que  ganó Junior con el triunfo ante Uniautónoma FC y la clasificación a los cuartos de final de la Copa Postobón se perdió con un intercambio de golpes entre el asistente técnico Víctor Danilo Pacheco y Luis Quiñones, nuevamente protagonista en actos de indisciplina.

“La verdad me calenté y no aguanté”. Con esta frase Víctor Pacheco resume el altercado que tuvo con Quiñones, algo que quiere dejar en el pasado.

Todo comenzó la noche del pasado miércoles en pleno juego entre Junior y Llaneros FC, por Copa Postobón. En la tribuna de occidental baja se encontraban observando el partido los jugadores Luis Quiñones, Juan Guillermo Domínguez, Michael Ortega y el asistente técnico Víctor Pacheco. Cuentan las fuentes que Quiñones se encontraba en estado de embriaguez y comenzó a lanzar improperios contra algunos de sus compañeros que se encontraban en el terreno de juego, en especial al juvenil Jarlan Barrera. Pacheco se molestó con la actitud del jugador y le exigió respeto. Quiñones hizo caso omiso al llamado y la tomó contra el exjugador rojiblanco, asegurando que él le cobraba “plata a los jugadores para ponerlos a jugar”.

“Eran calenturas de él, comenzó a agredirme verbalmente y a hablar mal de los compañeros, cosa que no me gustó y ahí empezamos alegar mucho más”, cuenta Pacheco.

El pleito se trasladó hasta el camerino donde hubo intercambio de golpes. A Narváez le tocó tomar partida, defendiendo a Pacheco y agredió a Quiñones, según palabras de los testigos. “Estoy tranquilo, hice una cosa por el club, por el compañero y por el respeto de todo el grupo. A Pacheco todos lo queremos porque sabemos lo que significa para esta institución”, expresó ayer Narváez.

Juan Guillermo Domínguez, quien también habría cuestionado la labor del técnico Julio Comesaña en el juego ante Llaneros FC, sacó a Quiñones del camerino y ahí todo terminó.

Al día siguiente, Junior volvió a entrenamientos en la sede deportiva de Bomboná, pero Comesaña sorprendió a todos al retirar de la práctica a Luis Quiñones, Juan Guillermo Domínguez y Michael Ortega. Este último no entendió la decisión del técnico, debido a que no tuvo nada que ver con el altercado. “El profesor no me dio explicaciones, sus razones tendrá, me mandó a esperar un llamado de los directivos. Dense cuenta como es la ‘vuelta’, me sacan porque supuestamente llegué borracho, pero no tienen pruebas de eso. Lo que están haciendo con mi nombre es una falta de respeto, porque tampoco me dan explicaciones de por qué me están sacando de los entrenamientos. Me pueden criticar porque juegue mal, pero no por borrachón”, aseguró Ortega.

Víctor Pacheco confirmó la versión del ‘10’ rojiblanco al confesar que no tuvo nada que ver en el pleito. “En ningún momento he dicho que Michael Ortega esté involucrado o el mismo Juan Guillermo Domínguez. Ellos estaban tranquilos en la tribuna”, expresó.

El ambiente está tenso, eso se percibe en la respuesta de Comesaña, quien poco o nada ha dicho con respecto a la situación que se vivió en el camerino “Pregúnteles a los artistas”, respondió ayer cuando los medios de comunicación se le acercaron buscando su opinión de lo sucedido. Comesaña bajó el vidrio de su vehículo, soltó la frase y siguió derecho.

Luego del entrenamiento de ayer, Michael Ortega, que nuevamente fue separado de la práctica, se mostró molesto, exigió respeto y dio a entender que su relación con el técnico Julio Comesaña no es la mejor.

Víctor Pacheco, por su parte, quiere dejar el altercado en el pasado y ahora solo se centra en el juego ante Millonarios. El asistente técnico de Comesaña afirmó que esta no es la primera vez que se presentan este tipo de hechos en el fútbol. “Lo que pasó se queda en el camerino. No es la primera vez que pasa esto en el fútbol ni conmigo. Desafortunadamente me volvió a tocar”, respondió.

Los directivos del Junior se reunieron ayer para analizar detalladamente los hechos, pero aún no han decidido qué va a pasar con Quiñones, Domínguez y Ortega. Según le confirmó a EL HERALDO una fuente cercana al club, todo se solucionará cuando Julio Comesaña regrese de Bogotá.

Los actos de quiñones

No es la primera vez que Luis Quiñones comete un acto de indisciplina en Junior. El vallecaucano, que se ha ausentado de algunos entrenamientos sin explicación alguna y que llegó tarde a la pretemporada, por encontrarse resolviendo problemas en Cali, protagonizó un bochornoso episodio con los hinchas del equipo rojiblanco. Quiñones colocó en su cuenta de Instagram un escudo del Cali con el mensaje : “esta es mi verdadera casa”. No contento con eso, se dedicó a insultar a los hinchas que opinaban y por eso Comesaña lo separó en su momento del plantel.

Narváez tiene antecedentes

Desde que Luis Narváez está en Junior esta es la segunda vez que se ve involucrado en un hecho en donde tiene que utilizar los golpes. La primera ocasión fue el 1 de noviembre de 2012 cuando en un entrenamiento terminó a golpes con el jugador Leonardo López. En esa ocasión Narváez utilizó su puños porque no le gustó la forma en la que le entró López. Ambos jugadores se fueron a las manos y terminaron separados por sus compañeros. Narváez volvió a mostrar, en su altercado con Quiñones, que es un jugador de carácter fuerte dentro y fuera de la cancha.

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