‘La Fortuna’, fortaleza del Gyr
Fundamentada en el potencial genético lechero de la tradicional Granja Santiago de Tolú, Sucre, una ganadería con más de 50 años de prestigio en el sector.
Una de las ganaderías más representativas en la cría del Gyr, es La Fortuna, ubicada en Tolú (Sucre), a 2 km. de las hermosas playas de El Francés, de propiedad del empresario y odontólogo de profesión Adolfo González.
Dedicada a la producción lechera, está certificada Libre de Brucelosis y Tuberculosis, y en Buenas Prácticas Ganaderas en producción de Leche por el ICA. Parte de la ganadería Granja Santiago (GS), con más de 50 años de tradición lechera en el Doble Propósito, reconocida por sus participaciones en eventos, donde ha sido distinguida varias veces como Mejor Criador y Mejor Expositor, y ganadora de los concursos lecheros en ferias como las de Sincelejo, Montería, Sincé, Chinú, Lorica y Cartagena.
ANTECEDENTES CON GYR.
La explotación se trabajaba con ejemplares mestizos (7 colores), productores de leche, pero con altos requerimientos de manejo nutricional y sanitario, altos costos que hicieron tomar la decisión, de buscar un animal más rústico, adaptado y resistente, buen productor de leche en condiciones de pastoreo, más rentable, que exigiera menos inversión en el manejo.
El Gyr, por sus cualidades, permitía esa posibilidad, entre otras razones por ser originaria de la región desértica de la India, ser de las más antiguas de la tierra, y por el mejoramiento genético que se desarrollaba en Brasil.
En 1994, se escogió la vacada con mayor grado de sangre cebuína, y comenzó a introducirse el Gyr, para llevarla al Gyr por absorción de hoy; vacas con un porcentaje de 7/8 y 15/16 Gyr, con excelentes producciones en pastoreo, 9 a 12 kg/día, adaptadas para enfrentar el trópico, resistentes, longevas, fértiles y con habilidad materna.
Muchas, han sido incluidas en el programa de clasificación de Asocebú. Con estos buenos resultados, se adquirieron vientres Gyr puros de las mejores ganaderías, en su mayoría producto de la FIV; y se han importado embriones hijos de las mejores vacas de fazenda Terra Vermelha (Brasil), con el reconocido hierro CA, productor de CA Sansao, el mejor toro Gyr de la historia.
CONTROL LECHERO.
El hato es pionero en el control lechero oficial de Asocebú, desde los inicios del programa en 2012. Hay vacas Gyr puras y clasificadas, todas son ordeñadas, y se han obtenido lactancias entre 2.100 a 3.000 kg. de leche, datos respaldados en los libros de controles lecheros Asocebú.
Hace 2 años, empezó solo con 10 vacas en el programa, y actualmente se ordeñan en cada control entre 50 y 60, con promedio de 8 kg., un solo ordeño a pastoreo. Uno de los retos, es llegar a promedios de lactancias en 2.500 kg/305 días. Hay casos de vacas paridas, donde se puede observar que en 7 meses de lactancia, se mantienen producciones de 8 a 10 kg. de leche/día, y que ya se encuentran preñadas.
Este comportamiento equilibrado entre producción y reproducción, hace que el Gyr sea definido así por su propietario: “nos ha entregado esa vaca adaptada para producir leche en climas cálidos, que nuestra familia había buscado por años, experimentando con todos los cruces posibles, y con la que hemos mejorado la rentabilidad, al producir más leche y disminuir costos en drogas, manejo y concentrados”.
TRADICIÓN.
El criador explica, que él forma parte de la tercera generación de su familia, dedicada a esta actividad, y que gracias a este bagaje que fue aprendiendo desde niño, transmitido por su padre, don Adolfo González Patrón (q.e.p.d.), y que viene desde sus abuelos, ha logrado consolidar un hato reconocido. “Recuerdo cuando tenía 3 o 4 años, que mi abuelo me llevaba al ordeño, y desde entonces nació mi pasión por la ganadería”, dijo.
Agregó que “no todo lo nuestro es Gyr, solo un porcentaje. Mantenemos las mejores vacas de mi papá, muy productoras de leche: Pardo Suizo, Ashisre por Hartón. Cruzamos Pardo por Brahman rojo, con Gyr, y mantenemos el componente criollo del Hartón”.
“Tolú, cumplirá 480 años. Su tradición es turística, pero tiene unos magníficos antecedentes ganaderos: el primer puerto exportador de carne del país, fue el Paking House (1919, en Coveñas. Nuestro bisabuelo, Julián Patrón Airiarte, lo ideó con otros ganaderos del entonces gran departamento de Bolívar (Vélez Daníes, Celedonio Piñeres, y Diego Martínez), y la empresa norteamericana The International Products Co., con experiencia en plantas frigoríficas en Paraguay y Argentina”.
“Constituyeron la empresa Colombia Products Co., cuyo objeto fue la construcción del frigorífico, pionero en el país, para la exportación de carne refrigerada y congelada”.
